José Rafael Dávila Ángulo, más
conocido como el hijo ilustre del Magdalena, contó su trayectoria, recuerdos y
experiencias en el mundo de las artes y la cultura. Actualmente, es Presidente
de la junta directiva de la Quinta de San Pedro Alejandrino. Este año, se le
otorgó la Cruz de Bastidas, máximo reconocimiento por la Gobernación como el mejor
historiador del Magdalena.
A sus 90 años, ¿cuál ha sido el suceso histórico que más
le ha llamado la atención?
Se relaciona con Simón Bolívar, soy bolivariano a morir,
se puede decir que es una enfermedad para mí. El acto que marcó mi vida y mis
pasos a Bolívar fue aquí en Santa Marta, el 17 de diciembre de 1930, en donde se conmemoró el centenario
de la muerte de Bolívar. Desde ese momento
creció mi espíritu y mi amor bolivariano, creo que Santa Marta fue la
ciudad qué vio más de cerca a Simón
Bolívar, fue la ciudad que lo vio morir y muchas veces triunfar.
¿Qué exposiciones de arte en Santa Marta recomienda?
Yo soy fundador del Museo Bolivariano de arte
contemporáneo y miembro de la junta directiva de la Quinta de San Pedro
Alejandrino. Sin dudas, recomiendo que visiten con frecuencia el Museo Bolivariano
de arte en Santa Marta, no solo por sus exposiciones si no por los pintores
consagrados que exponen sus pinturas y dictan cátedras interesantes,
conferencias de arte sin ningún costo para los interesados.
Cuéntenos su pasión por la Fotografía
Fue siempre mi hobbie; desde
mis 8 años, me gustó la fotografía, hice muchas fotos, fotos hechas en Europa y
muchas a Guillermo Valencia recitando el acto del centenario de la muerte de
Bolívar el 17 de diciembre de 1930. En mis viajes al viejo continente,
fotografié de lejos a Hitler en Alemania y conservo esa fotografía como si
fuera un tesoro.
¿Se considera fiel seguidor
de Bolívar?
Completamente, sigo a Bolívar
desde que nací, eso creo. Me encanta su ideología, la manera de liderar y el
valor que tuvo para enfrentar tantas adversidades, fue un hombre guerrero;
mujeriego, pero discreto.
Deme su visión acerca el
Periodismo Cultural Especializado en Santa Marta
Es un periodismo en el
olvido, se lo llevó el viento. Solo lo cubrimos los historiadores, los
literatos y artistas. La cultura no es una pasión para todo el mundo. En esta
sociedad hay mucho periodista dedicado a reportero de política y deporte, pero
no un tema tan importante como la cultura, ya esos periódicos de antes no se
ven; el mejor periódico que me he leído en mi vida se llamaba La Gaceta
Mercantil y no he visto un mejor fundador como Manuel Murillo Toro. Creo que ese
periodismo está olvidado o que siempre lo han ejercido las personas conocedoras
de la cultura y no periodistas que parece que le temieran a la cultura.
¿Qué libro recomienda que sea un aporte a nuestra
cultura?
Me gusta leer, todo lo que sé hoy en día es por lo que he
leído. Cuando joven me leí los libros clásicos de la literatura griega, como
Plutarco, teatro latino, la divina comedia de Dante y, por supuesto, Don
Quijote de la Mancha, porque simplemente es un libro para enriquecernos de
cultura general y actualmente mi favorito La vida de Jesús de Giovanni Papini.
¿Qué música es aportante a la cultura samaria?
Mi estilo y vocación se va por la música clásica,
selecta, obras de los grandes compositores. Uno de mis preferidos Beethoven,
Vivaldi, Mozart, y Escalona de quien fui amigo personal. En la actualidad,
Carlos Vives se deja escuchar.
Hoy a sus 90 años, ¿qué le
faltó por vivir?
Ay, vida mía, cada día me
hace más falta, después de haber hecho y deshecho me hace falta el señor. Dios,
quisiera tener más devoción de la que tengo y pienso que todo lo demás ha sido
efímero, se evapora, delicioso, placentero y amargo. Soy exageradamente romántico
y nostálgico, depronto amores fallidos que no se dieron, incurables melancolías
y recuerdos que entristecen el corazón. En fin, tantas cosas.
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