Santa Marta se ha caracterizado por ser una ciudad
turística por todos los atractivos que
esta posee, sin embargo, durante los últimos años, además de ser única por sus
encantos, también ha tomado auge por su versátil gastronomía, en especial, la
imposición de la comida internacional, que poco a poco, ha ido posesionándose dentro
de la ciudad, teniendo en cuenta que esta costumbre adoptada no solo se ha
desenvuelto en la Perla del Caribe, sino, por toda la Región Caribe.
La gastronomía
internacional, en ciudades pequeñas pero turísticas como Santa Marta, es una
forma de expandir más nuestros encantos, con el fin, de ir evolucionando como
ciudad y así mismo, tener la capacidad para adoptar costumbres ajenas a las
pertenecientes de la cultura Caribe.
Hoy en día, muchos cheff de
la Región Caribe, optan por querer incursionar en el mundo gastronómico
internacional, ya que este tipo de comidas les brindan más aprendizajes a sus
conocimientos culinarios, hay más variedad gastronómica y es una nueva cultura
que se encuentran aprendiendo. Ejemplo de ello es el, cheff samario Juan Escorcia, quien desde el año
1983 se encuentra divagando en la cocina internacional, aludiendo que, aunque
respeta la comida de su región, siempre le ha gustado cocinar platos de otros
lugares, porque siente, que esto abre más su conocimiento gastronómico.
Escorcia, asegura que la
cocina internacional se ha tomado la ciudad “Por
la fuerte llegada del turismo del
exterior, que vienen a conocer esta zona y a su vez a conocer la gastronomía
del país, pero también vienen a consumir la gastronomía de sus países, por eso
este tipo de comida se está posesionando con un gran nivel.”
Juan Escorcia, se ha
especializado siempre en la gastronomía internacional, porque nunca le ha
llamado la atención cocinar los platos típicos del Caribe, afirma que “La comida internacional es más gourmet, me
gusta cocinar más elegantemente, en cambio la criolla, no necesita mostrar
buena presentación, ya que la mayoría de sus cosas son fritas y se preparan con
nuestros ingredientes básicos, por eso nunca me ha llamado la atención cocinar
con los platos típicos de acá, además que siempre he trabajado en restaurantes
de comida italiana”.
Según lo aprendido a lo
largo de sus años, afirma que las comidas internacionales que más les gusta
deleitar a los extranjeros, incluso a los mismos costeños son la italiana y la
francesa, comenta que los platos de estas doctrinas internacionales, son las
más apetecidas.
En su aérea de trabajo, Juan
nos comenta que, los clientes tienden a pedir platos como el Penne Fruto Di
Mari, el cual es una pasta corta (parecida al macarrón) bañada en una salsa de
mariscos, o simplemente prefieren lasagnas o algo más a la carta como los son
los Spaguettis Carbonaras. De igual forma, sea cual sea el plato que las
personas vayan a consumir, se debe resaltar que cada vez la imposición de esta
cultura gastronómica crece y con ella,
aumenta también el turismo y por ende la ciudad en general.
Y así como Juan Escorcia,
también encontramos a Alejandro Ospina, cheff samario, quien decidió apostarle
a este tipo de comida, con la diferencia que él opta más por los platos
fusiones, es decir, las combinaciones de ingredientes del Caribe con
ingredientes de otros lugares.
Ospina, siempre ha
expresado que mantener la cultura Caribe es importante, pero que por el
crecimiento que la ciudad samaria está teniendo es válido, que también podamos
crecer gastronómicamente, por eso, en su restaurante Sauté, especializado en
mariscos, se dedica al plato fusión, donde el mismo cliente propone a escoger
su proteína ya sea un pollo, una carne o cualquier tipo de marisco y luego de dicha escogencia, el cliente también
escoge el estilo a consumir, ya sea oriental, a lo francesa o cualquier estilo
que desee y que el restaurante a cargo del mencionado, ofrece.
Alejandro, comenta que lleva
cinco meses en Santa Marta y que optó por esta ciudad, porque siempre ha
querido dejar plasmado todos sus conocimientos acerca de la gastronomía en su
tierra natal, pues, fue un personaje que se fue a aprender, pero siempre
mantuvo la convicción de volver y de aplicar todo lo aprendido a lo largo de
sus años de conocimientos.
Ospina, afirma que en el gremio de la comida
internacional, en su restaurante, la más apetecida es el estilo mediterráneo,
un estilo gastronómico que es pedido por los extranjeros y en especial, por los
samarios que en la actualidad han expandido más su paladar.
Y así como este tipo de
comidas es impulsada, por las mismas personas de la Región, también son los
mismos extranjeros quienes deciden aportar todas sus enseñanzas a la Perla de
América, ejemplo de esto, es la española Jtziar Seral, propietaria del
restaurante La Perla, quien hace nueve años se encuentra en esta ciudad
apostándole a la gastronomía internacional y al mismo tiempo a la Caribe,
porque así como Ospina, considera que nuestra costumbre tampoco se puede
abandonar.
Seral, una española con
altos conocimientos gastronómicos, nos afirma que aparte de las nuevas
experiencias de deleitar de platos nuevos, la importancia de la gastronomía
extranjera, también radica en el buen servicio que los propietarios de
restaurantes extranjeros, que generalmente son europeos, le dan al cliente, “pues tanto la cultura gastronómica como la
cultura social, hacen de un establecimiento culinario, el mejor”, expresa
Jtziar.
Seral, como primera medida
llego a Santa Marta, más que con la visión de montar un restaurante
internacional, fue por amor, pues ella comenta que se enamoró de su esposo
samario en Barcelona, su antigua residencia, durante la época de los estudios
de ambos y desde ahí por cuestiones laborales de su pareja se tuvieron que
venir a la ciudad, y fue a medida que pasaba el tiempo que decidió aplicar
todos sus conocimientos gastronómicos en la montura de su establecimiento con
el fin, de brindarle a sus clientes variedad de comidas, pero sobre todo, con
un buen servicio al cliente, pues aparte de su especialidad gastronómica, su
gran labor es servirle bien a todo aquel que la visita en su recinto culinario.
En este mundo gastronómico,
también encontramos a Martín Uribe, otro cheff de comida internacional, nativo
de Armenia, quien sus conocimientos culinarios los adquirió en el exterior y
también fue otro personaje, que decidió apostarle a Santa Marta, pero con la
particularidad de implementar sus propios platos, de forma artesanal, tratando
así de marcar, su propia huella en este exquisito mundo.
Uribe, propietario del
restaurante LamArt nos afirma que el decidió escoger Santa Marta, para aplicar
todos sus conocimientos por el amplio turismo que a la ciudad le llega y porque
cree en el crecimiento que aquí se está evidenciando, además de eso, porque
cree que las nuevas culturas gastronómicas le sentaría muy bien a la ciudad,
pues según él, la experiencia de adquirir nuevas cosas es lo que le gusta al
costeño.
Martín, se ha dedicado a
implementación de los mariscos en ceviche, en pocas palabras, la creación
de pescados en diferentes
presentaciones, nos asegura que su gran especialidad son los ceviches peruanos
que son hecho a base de pescado blanco y las pastas artesanales, apuntando un
poco hacia la comida italiana, que es una de las que más se vende.
Martín Uribe, dice que desde
que llego a Santa Marta, hace cuatro años, se siente cómodo, pues dice que “la comida internacional en esta ciudad del
Caribe ha tenido gran acogida y eso me demuestra que si vale la pena seguir
trabajando en ella, seguir inventando, para seguir alimentando el paladar de
los locales que son mi prioridad, pues aquí es donde me encuentro viviendo y de
los extranjeros también que no olvidan sus costumbres pero que también quieren
probar cosas nuevas de esta tierra calurosa”.
Pascall Guteknuts,
un extranjero alemán de visita en la
ciudad, comenta que, se siente a gusto probando la comida criolla de nuestra
tierra, pero que por el alto exceso de grasa que estas tienen, poco le llaman
la atención y que prefiere seguir
deleitando de la comida de su tierra, pues afirma que, está es más saludable.
Guteknuts, también optaría
por montar un restaurante en Santa Marta, pero con el fin de que conozcan la
gastronomía alemana, y no se queden solo en la del Caribe. Pascall, ve como
buenas opciones los restaurantes internacionales, afirma que “Santa Marta, ahora sí está creciendo desde
todos los aspectos tanto sociales, como gastronómicos y eso me agrada mucho”.
Y así como Pascall, también
muchos extranjeros optan por ese pensamiento, sin embargo, samarios que no se
encuentran en este mundo gastronómico, afirman que la mejor comida es la de la
tradición samaria, porque con eso es que el nativo de esta tierra ha crecido y
no ven viable que la tilden a desaparecer, por la satisfacción de querer cosas
nuevas.
Y es así como lo expresa,
Jesús Acosta, un samario residente en Argentina, que afirma que, estando lejos,
es donde extraña el exquisito mundo de la gastronomía samaria, puesto que en el
exterior muy poco se ve las delicias nativas de nuestra tierra. “Considero que la gastronomía Caribe no debe
estar tan olvidada, pues es algo que nos pertenece a nosotros y es algo que no
se debe perder, por la cultura, por la historia que todos estos platos típicos
tienen”. Comenta, Acosta.
Del mismo modo, también nos
encontramos con Carlos Osorio López, un costeño que se encuentra en España,
quien nos afirma que, nada mejor que la comida del Caribe, y que tampoco ve las
razones lógicas por las cuales, este tipo de gastronomía está siendo abandonada
por los nativos de la región, ya que no es solo en Santa Marta donde se ve este
desapego a la comida Caribe, sino en la Costa en general, y da pesar ver como
la tradición, poco a poco está siendo abandonada por los costeños mismos.
No hay que dejar de observar
que el posicionamiento de la gastronomía internacional en Santa Marta, es
importante puesto que ayuda al alto crecimiento, como ya antes se había
mencionado, llama más la atención del turismo y así mismo, hace que Santa
Marta, se convierta en un buen lugar para darle gusto a tu paladar, pero no se
debe de dejar a un lado la comida típica de la ciudad, pues muchas veces el
turismo del interior también busca probar lo natural de estas tierras.
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