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viernes, 19 de septiembre de 2014

La música clásica en Santa Marta, un mundo de oportunidades

La periodista Ivonne García y el músico
 Ramón Blanco
Por Esmeralda Pineda e Ivonne García

Santa Marta cuenta con grandes fundaciones y escuelas de música que apoyan y motivan a los jóvenes samarios a que se vinculen y hagan parte de estos programas musicales.

Karib’es color y música es una fundación sin ánimo de lucro con una conciencia de protección y conservación del patrimonio cultural e histórico a través de actividades de educación.

Ramón Blanco, representante legal de la fundación Karib’es color y música, afirma que “sus objetivos principales son de definir el arte en sus diferentes modalidades: artes plásticas, música, escritura, poesía, lectura, canto y pintura.” 


El clasicismo es el estilo de la música culta europea desarrollada, aproximadamente, entre 1750 a 1820, durante este, periodo Mozart y Beethoven improvisaban a veces las cadencias de sus conciertos para piano y animaban a otros a hacer lo mismo.

La periodista Esmeralda Pineda y el pianista
Jeison Ávila
Hablamos sobre el tema con el profesor de piano, Jeison Ávila, quien dijo lo siguiente: “Mi consejo para los jóvenes es que no escuchen tanto el reggaetón o el vallenato sino que deberían aprovechar el internet o las escuelas para que aprendan y desarrollen su capacidad de tocar un instrumento de la música clásica que es rica en armonía y melodía”.

En el Distrito de Santa Marta, se encuentra el centro de cuerdas por parte de la Fundación Nacional Batuta.

El objetivo principal de los fundadores fue fortalecer e incrementar el disfrute, la práctica y la enseñanza de la música en el país y generar mayores oportunidades para el ejercicio de los derechos culturales de los niños y niñas colombianos.

“Para desarrollar el proyecto en Santa Marta se hace por medio de un convenio con la empresa Ecopetrol. Esta fundación musical les entrega becas a los niños y niñas de los estratos 1, 2 y 3, para que los jóvenes se formen como músicos. Esta escuela les brinda un ambiente libre de droga”, expresó la asistente administrativa de la Fundación Nacional Batuta de Santa Marta, Gloria Lora Novoa.
Integrantes del Centro de Formación Musical Cajamag

En el año 2012 publicaron una noticia en la página de la Fundación Nacional Batuta, titulada así: Alcaldía Distrital de Santa Marta, Magdalena, apoya a niños de escasos recursos de la Fundación “Batuta”.

Jorge Brito Arias, coordinador musical de la Fundación Nacional Batuta, dijo a la Federación Colombiana de Municipios que "todos los niños que pertenecen al programa, provienen de la población desplazada y población vulnerable de esta ciudad. Nos sentimos muy agradecidos por el apoyo que nos brinda el Alcalde en la educación de los menores".
Se puede decir que la música, sin lugar a dudas, es el elemento primordial para lograr el equilibrio afectivo, intelectual, sensorial y motriz que persigue la educación en el nivel pre-escolar y escolar.

Por eso, Santa Marta cuenta con otras escuelas que forman a los jóvenes que les gusta la música clásica.

Jeiner Rivera, de Batuta
Carolina Prado, Coordinadora del Centro de Formación Musical Cajamag, afirma que “ofrecen educación musical a niños, jóvenes y adultos afiliados y no afiliados, además brinda y propone espacios en donde los alumnos logran llevar a la práctica los conocimientos  adquiridos en la música, convirtiéndose en personas sensibles e integrales con nuevas expectativas para el enriquecimiento de sus relaciones interpersonales, autoestima y trabajos en equipos”.

Todo ser humano puede tener acceso a la música. No hay una carencia absoluta de aptitudes musicales, sólo hay que despertarlas y desarrollarlas.
La música clásica corresponde únicamente a la música culta compuesta en el período clásico, de mediados del siglo XVIII hasta principios del XIX. El término “música clásica” se ha extendido también a la música seria compuesta entre el medioevo y el presente.

En general, se le llama “clásica”, pero los que saben, dicen que tal nombre se debe reservar para tal música, pero solo para la que se hizo en un tiempo determinado, que se conoce como el período clásico de la música, aquel periodo en el que se destacaron Haydn, Mozart y Beethoven.

Puede ser llamada también música “culta”, pero en el concepto moderno, toda música es producto de una cultura, entendiendo por esta, el conjunto de ideas, creencias religiosas, ciencias, artes y costumbres que forman y caracterizan el estado social de un pueblo o una raza.

Felipe Mosquera, violista
Sin embargo, para el común de las personas no es fácil entender el idioma de la música culta que data del periodo clásico. De todas formas, lo que define a este estilo musical es excluyente. Se trata de aquella que no es popular ni folklórica. Es realizada por pocos, con la idea de que le guste a muchos, pero estos no suelen ser tantos en general. Sus autores y ejecutores han estudiado una larga carrera en escuelas especiales, conservatorios, y sus oyentes; en general, han sido inducidos a gustarla por tradición familiar, que, luego, puede cultivarse. Por esta razón, se hace una invitación a los padres para que motiven a sus hijos a ingresar a una fundación que les enseñe lo que es la música clásica.

Según Felipe Mosquera, estudioso de la música clásica y a quien desde muy temprana edad, su mamá lo motivó para que ingresara a una escuela y se formara como violista profesional, “mis aspiraciones es terminar mi carrera y ser profesional para después hacer mi maestría en música de cámara”. 

Es placentero que en Santa Marta, donde la música popular ha encontrado acogida por estar ligada a las raíces de esta tierra, existan escuelas de formación para el entendimiento de la música clásica.


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